En la cultura en la cual nos hemos desarrollado el placer esta directamente vinculado con la felicidad, es decir si tienes placer eres feliz, si no tienes placer no lo eres.
Sin embargo si miramos atrás y nos fijamos en la mayoría de las filosofías clásicas de la antigüedad veríamos que el concepto de felicidad se percibía de una manera diferente, es por esto que los psicólogos actuales cada vez están retomando mayor interés en rescatar los principios de dichas filosofías.
Si tomamos como ejemplo el pensamiento del filósofo Epicteto nos daríamos cuenta que la felicidad, vista desde su lógica, comenzaba y terminaba en la mente, con esto llegamos a la conclusión de que la percepción con la que vemos las cosas es la clave para lograr una felicidad constante.
El creador de la terapia racional-emocional Albert Ellis explica ésta teoría con más profundidad afirmando que la forma en la que las personas reaccionan a las diferentes situaciones de la vida es determinada en mayor parte por la forma en que éstas personas perciben las situaciones.
Partiendo de ésta filosofía de la felicidad aquí están algunas de las reglas a seguir para poder alcanzarla en nuestra vida diaria.
- Disfruta el momento
- Vive en el presente, en el ahora, deja de preocuparte por las cosas que ya pasaron o que apenas pasarán. Disfruta los momentos de plenitud y alegría por simples y pequeños que éstos sean.
- Acepta que la felicidad más que un destino es un viaje y requiere esfuerzo
- Si percibes la felicidad como una línea de llegada cada vez se presente una dificultad en el camino sentirás como si fuera el fin del mundo, por el contrario si vez la felicidad como un viaje y te sientes agradecido por cada etapa superada será más fácil lidiar con los problemas que se puedan presentar en el camino.
- Ajusta tus percepciones
- A pesar de que las circunstancias en las que nos desenvolvemos nos afectan nuestro estado de ánimo lo cierto es que la manera en la que tomemos la situación influencia en una mayor forma cómo nos sentimos, tratar de percibir las situaciones desde todos los ángulos nos ayudará a sentirnos mejor.
- Identifica tus actitudes y moldéalas
- Podemos no ser capaces de controlar las cosas que se nos ponen enfrente pero si podemos controlar lo que hacemos de ellas. La felicidad es un viaje de encuentro personal, no necesariamente tienes que estar feliz siempre, sin embargo si tomas una actitud positiva y moldeas te mantienes abierto a moldear tu carácter el regresar a un estado de plenitud será cuestión de tiempo.
El sentirte en paz internamente ayuda en el proceso de alcanzar un sentimiento de felicidad, para esto es importante liberarnos de las tensiones diarias que nos causan las rutina y el estrés. Para tratar con éstos malestares una buena opción es probar la utilización de ingredientes naturales, en Biohomed podrás encontrar productos como la Crema Relajante hecha a base de aceite de lavanda y rosa de geranio, compuestos que te ayudan a lograr una paz y relajación interna.