Cuidas tu dieta, haces ejercicio, pasas tiempo con tus seres queridos, así que deberías sentirte en perfecto estado de salud… ¿pero no es así? Si aún sientes que algo falta, puede que estés pasando por alto una pieza esencial en el rompecabezas: tus hormonas. Las hormonas afectan todo lo que sucede en tu cuerpo:
1. La píldora no “arregla” nada.
Contrario a la creencia común, la píldora no alivia el Síndrome Premenstrual, el acné, los cambios de humor o las irregularidades en la menstruación. La píldora sólo cubre los síntomas con una cascada artificial de hormonas que bloquea los ritmos naturales del cuerpo.
2. Tus hormonas son tus mejores aliadas.
El balance hormonal no sólo te da una piel radiante, también peso estable, un estado de ánimo maravilloso y un alto nivel de energía. Conocer los patrones de tu ciclo hormonal y cómo afectan a tu cuerpo te da una gran ventaja. No pelees contra tu ciclo, conócelo y aprovecha los diferentes estados del mes para lograr tus metas.
3. Sufrir de síndrome pre-menstrual no es normal.
Recuerda que común no es sinónimo de normal. Muchas consideran una catástrofe “ese momento del mes”, pero la hinchazón, los calambres abdominales y el acné no son un mal necesario. Nuestro cuerpo puede atravesar el ciclo menstrual sin sentirse terrible. Si sufres de síntomas premenstruales, significa que tus niveles de estrógeno y progesterona están desbalanceados, y necesitas hacer algunos cambios alimenticios para atender la raíz de los síntomas y dejar de sentirte terrible.
4. El origen de las hormonas es la grasa.
Antes de desterrar las grasas de tu dieta, toma nota: no es posible fabricar hormonas sin grasa. Sin una ingesta apropiada de grasa, tu cuerpo no tiene los ladrillos necesarios para construir hormonas de manera constante y estable, lo que hace a tu cuerpo vulnerable a desbalances hormonales, con consecuencias que van desde síntomas premenstruales y quistes ováricos hasta infertilidad. ¡Incluye en tu dieta grasas saludables!
5. Muchos desbalances hormonales son causados por deficiencia en micronutrientes.
Cuando queremos optimizar nuestro funcionamiento hormonal, es importante proveer los macro y micro nutriente esenciales para su funcionamiento. Los ácidos grasos no saturados como los Omega 3, y los minerales como el yodo, zinc, magnesio y calcio son esenciales como co-factores para el funcionamiento hormonal.
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